Rastrillo de heno tradicional Lofer, 20 dientes de madera | Rastrillos

Vista previa: Rastrillo de heno tradicional Lofer, 20 dientes de madera

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Los rastrillos de heno con cabeza de rastrillo curvada (yugo) son especialmente fáciles de arrastrar, sin pesados arranques ni enganches. La forma curvada única, que sólo fabrican los rastrillos Lofer según la antigua tradición, impide que los dientes exteriores se apoyen al mismo tiempo unos sobre otros. Este diseño probado y comprobado ha demostrado su eficacia en la agricultura durante siglos. Las púas de madera también hacen que el rastrillo funcione con suavidad. Longitud del mango 1,80 m. Fabricado en Austria.

Rastrillo Lofer

La producción de rastrillos en Austria está profundamente arraigada en las tradiciones agrícolas regionales. El secreto reside en la cuidadosa selección de la madera talada exclusivamente en invierno en los bosques locales. Tras un largo y cuidadoso proceso de secado, la madera se clasifica sin nudos para el yugo del rastrillo, las púas de madera y los mangos, y se procesa tanto mecánicamente como a mano según los métodos tradicionales.

Mangos de rastrillo de madera de tilo

La madera de tilo es extremadamente flexible en la mano, es muy ligera, elástica y no se deforma. La conicidad del extremo del mango aumenta la estabilidad y optimiza el manejo durante el uso.

Púas de nylon

Las púas patentadas del rastrillo, fabricadas en nylon de alta calidad, son especialmente resistentes a los golpes y permanentemente elásticas; es imposible que se rompan. Si las púas se estiran en exceso, vuelven automáticamente a su posición original.

Alta estabilidad a los rayos UV
Alta resistencia a la abrasión, lo que se traduce en un bajo desgaste
Elasticidad permanente, que impide que las púas se vuelvan quebradizas
Puede utilizarse hasta -5 °C

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Lofer

La producción de rastrillos en la región austriaca de Pinzgau tiene una larga tradición. En el pequeño pueblo de Lofer, los llamados rastrillos y mangos Lofer se fabrican a mano con madera local de alta calidad desde hace más de 150 años. La especialidad: extremadamente duraderos, ligeros y más estables que los rastrillos de hierro.